Capitulo 50: No son responsables.

Valeria, había logrado despertar a Camelia.

Mientras veía, que Tulipán era arrastrada, por el custodio hacia el escritorio.

Él observa que ella había, recuperado, a la muchacha les advierte, que se queden sentadas.

Al llegar, al escritorio, habré el cajón sacando un arma, empujando a Tulipán, hacia ellas.

Jazmín, no podía verlo desde, dónde estaba y eso la enojaba mucho.

Valeria se levanta del asiento, para ayudar a su hermana.

Mientras Asim, Javier y Damián llegaron a la bodega.

Damián descubre al guardia, atado y amordazado.

Eso indica que ellas estaban, ahí.

Javier le saca la mordaza, pidiendo que le diga, dónde estaban.

Le dicen que están, dentro de la bodega.

Asim, ordena que llamen a la policía.

Avisando dónde están.

Si conocía a las chicas, estás ya estarían tomando el control de ellos.

Y no se equivocó, en el momento, que él custodió se sentó en la silla, las tres dando un giro, se cubrieron con el sofá.

Jazmín tenía, un explosivo, tan pequeño, aunque muy letal.

Saca de su camisa un botón de su camisa, arrojándolo hacia donde estaba el hombre.

Con el choque del piso, este se activó dando pasó a una exposición, dejando a este muy malherido.

El escritorio estalló en pedazos, dejando en él, muchos trozos clavados en su cuerpo.

Camelia y Valeria al levantar la cabeza, pueden ver que Tulipán se encontraba herida por cubrir parte del cuerpo de estas.

Desde arriba Jazmín, al ver esto, corre hacia la escalera, debían salvar a su hermana.

Con la explosión, por la puerta aparecieron Asim y sus amigos.

Al ver lo ocurrido, corren a socorrerla, Camelia toma el maletín, inyecta a esta, para que no sintiera el dolor.

Sabían que si le sacaban, la madera de su espalda, podrían matarla o dejarla inválida.

Javier corre, por la camioneta, debía entrar al galpón para poder trasladarse, sin perder un segundo.

Damián se encargaba de asegurarse que el custodio y su jefe, estuvieran bien asegurados, mientras llegaba la policía.

Una vez todos dentro de esta, se dirigen a la salida y ven llegando las patrullas.

Javier informa por el teléfono, al comisario para que, detuvieran a estos y detengan a los dos hombres, que debían estar dentro de su auto y al guardia.

Ellos fueron hacia el hospital, no dejarían que a Tulipán le pasará nada, sabían que la herida, podía dejar secuelas.

Ninguno se animaba, a pensar en esa posibilidad.

Dentro del hospital.

Shomara había despertado, siendo trasladada a una habitación normal.

Su familia estaba, alrededor de ella, solo podían agradecer a Ala que ella estuviera bien.

Shomara, podía verlos felices, aunque le extrañaba que quien ella quería ver, no se encontraba.

Ángel siente, que su celular, estaba vibrando.

Aprovecha que todos, estaban saludando a la niña, se escabulle hacia el baño, para poder atender la llamada.

Asim:— Don Ángel, necesito que prepare con urgencia, un quirófano y nos esperen en la puerta del hospital.

Ángel:— pensando que Javier o Damián habían sido heridos, —¿Cómo y quién está herido?

Asim:— Es Tulipán, por favor apresure y no deje que Shomi se entere.

Ángel:— Si muchacho, ustedes tranquilos, me encargó de todo.

Al salir del baño, Assia nota que su esposo, no demostraba estar feliz.

Si ella, conocía a su esposo este, había recibido malas noticias.

Assia:— Mi pequeña princesa, con tu Tata, iremos a buscar, tu torta favorita.

Asi, tomamos té con ella y agradecemos tu recuperación.

Shomi— Contenta por tal detalle, — Gracias, aunque no creó que el médico, me permita.

Assia:— con voz socarrona, — Y quién dijo, que le pediremos permiso.

Todos al escucharla, comienzan a reír.

Sabiendo que es capaz, de hacer lo que quiera.

Y no habría nadie, que pudiera detenerla.

Ángel, sabe que su mujer, se dio cuenta, que él necesitaba salir.

Y no le quedaría otra que contar todo o al enterarse, estando enojada como estaba con ellos, sería peor.

Al salir, de la habitación de la niña, Assia, se para de frente a él, con el brazo izquierdo, en forma de jarro y su otro brazo con gestos, de decir, desembucha.

Toma la sabía decisión de contar, con pelos y señales la situación.

Assia, llama urgente a la enfermera, informormando que llamen al cirujano y que preparen todo para recibir a la muchacha.

Está, sin preguntar más, sale a cumplir con su petición.

Assia:— preocupada, — Más te vale, que nuestra niña no se entere o quedarás castigado de por vida.

Ángel:— Mujer, sabes que soy el primero, en querer que ella no se entere, en la situación en que se encuentra.

Es capaz de salir corriendo, a ver cómo se encuentra.

Y con ello, poner en riesgo su propia vida.

Assia:— sintiendo un dolor en el alma, — Encarga que alguien vaya por el pastel.

Y vayamos a la entrada, a esperarlos.

Mientras, ellos se dirigen a la entrada, la camioneta llegaba.

Asim baja, junto a sus amigos.

Las chicas bajan de la parte de atrás, Valeria estaba controlando a Tulipán, cuando ve que habían llegado.

Dos hombres vestidos de blanco, con una camilla en mano, traspasan a esta a la camilla, una enfermera llega, a ponerle suero y así bajar a Tulipán de la camioneta.

Valeria le informa que le dieron morfina, para que no sintiera dolor.

Una vez tras pasada, la llevan adentro del hospital y corriendo por el largo pasillo, suben a esta en el ascensor que los llevaría derecho al quirófano, dónde esperaban por ella.

Assia y Ángel, solo logran verla pasar.

Por lo que lograron ver, saben que será muy difícil, que no quedarán secuelas o peor perdiera la vida.

Esto sería un golpe grande para todas y más para su princesa.

Amaba a cada una de ellas, como sus hermanas.

Asim al verlos, saluda haciendo una reverencia y disculpándose por tal acontecimiento.

Valeria:— al escuchar, — Asim tú y los chicos no tienen culpa de nada, la decisión fue nuestra.

Camelia:— llorando, — Es verdad, nosotras tomamos la decisión y sabiendo que era la única oportunidad, de atrapar a esos bastardos.

Jazmín:— Y si hay algún culpable, sería yo, porque convencí a todas de vengar a Shomi y poder salvar a muchas mujeres de esos dos.

Assia:— dolida, — No, hay responsables entre nosotros, solo ellos han provocado, tanto dolor.

Y me encargaré de que lo paguen en vida.

Assia al escucharlas, solo sentía un amor profundo y haría todo lo que estuviera en sus manos, porque esa muchacha saliera con bien de esto.

Ahora, no solo debía de preocuparse, de que ella pudiera, aguantará la operación.

También debía hacer, que su bisnieta no se diera cuenta de nada.

Todos toman la decisión, de armar un plan.

Aprovecharían que Margarita, estaba en la estación, con la excusa, de quedarse a acompañar a Falak, Tulipán estaría cubriendo la espalda, de esta.

Y así, todos, esperaban en la sala de espera, noticias del cirujano.

Assia sabía que si se quedaban, con Ángel más tiempo alertaría a todos.

Le es entregado, por Manuel, el pastel y con esto se dirigen a la habitación de Shomara.

Ángel, antes de entrar, acaricia la mejilla de Assia, demostrándole, que debía cambiar, su rostro de preocupación.

Assia se recompone, poniendo una sonrisa, llevando en sus manos el pastel.

¿Podrán ocultar todo?, ¿qué pasará cuando la Rosa Negra se entere?, y ¿Quién creen que, se dará cuenta?, de todo.

Gracias por su apoyo incondicional.

Les deseó éxitos y bendiciones en sus vidas.

Mi saludo de siempre CARPEN DIEM ♥️.