Capitulo 53: Un nuevo o viejo enemigo.

Assia junto a su esposo, llegan a la fiscalía.

Se anuncia antes, la recepcionista.

Está al saber de quién se trataba, se dirige a la oficina del fiscal general.

Se levanta, de su asiento y pide que por favor la sigan, los conduce a un pasillo, hasta la oficina del fiscal.

Golpea esperando, ser atendida.

Al escuchar el permiso, abre y anuncia que los Sres, Daye habían llegado.

El fiscal se levanta de su asiento, al estar en camisa toma su saco y haciendo señas a esta, para que los haga pasar.

Con una reverencia, este recibe al matrimonio.

Assia, da gracias, por su pronta respuesta.

Ángel toma su mano, acompañándola a sentarse.

El fiscal vuelve a su asiento y espera que él también tome asiento para tomar su lugar.

No podía faltarle el respeto a tan distinguidas personas.

Assia necesitaba saber, que había pasado en estos días.

Assia:— Sr. Me podría informar, si ya está todo arreglado para comenzar el juicio. ¿Cuándo está previsto esto?.

Fiscal:— Le puedo comunicar, que todas las pruebas que nos han otorgado, han sido todas verificando.

El juez puso fecha, para dentro de dos semanas. Dónde se presentarán, los cargos a cada hombre detenido.

Ángel:— Disculpe, nos podría informar, cuando deben presentarse los testigos.

Para poder organizar su traslado.

Usted puede, asegurar que todos estén detenidos.

Fiscal:— Gracias a la información obtenida.

No solo hemos detenido a todos, pudimos además, ingresar a cada domicilio, lugar estratégico de cada uno.

Del Sr. Abdul, pudimos rescatar, toda la información en su búnker en el desierto.

Aunque debo informarle, que tanto el cómo los que estaban a cargo de ustedes.

Deberán ser entregados, el domingo por la noche.

Assia: — Usted, no se preocupe, estarán, ese día.

Sin ningún contratiempo.

Ellos, según lo pactado, enfrentan el juicio.

Nosotros, no somos asesinos.

Como sabrá, no dejaremos que salgan sin castigo.

Fiscal:— El juez y yo estamos más que agradecidos, de que ustedes, nos dejen demostrar que la justicia, es justa.

En estos momentos la Sra. Falak está siendo transportada, en cualquier momento está al caer.

Si desean esperar, será un placer dejar que vean todo el proceso.

Assia:— Me agradaría mucho, si me diera la oportunidad de estar unos momentos, con ella.

Solo quiero, que vea mi rostro, para que en el momento que la lleven a dónde merece, le quede en claro quien la llevó ahí.

Ángel:— preocupado por su salud,— Assia, sé que necesitas que ella sepa, que fuiste tú.

Te sugiero, que guardes eso, para el final de su condena.

Assia:— Amor, ella es una mujer grande.

Dentro de la cárcel, puede haber personas que quieran vengarse. No llegando al juicio, por eso quiero que se entere, quienes la enviaron ahí.

Fiscal:— Sra. Le aseguró, que ella no será enviada a la cárcel.

El juez determinó, que por su avanzada edad.

Será trasladada, a una casa de seguridad, donde será atendida, constantemente para asegurar la vida de ella.

Assia:— enojada, dando un golpe al escritorio,—¿por qué, se tomó esa determinación?

Ángel:— tomándola de la mano, — Assia por favor no te alteres, deben tener una razón, solo espera que te expliquen.

Fiscal:— preocupado de la reacción, — Sra. El juez tomo esa determinación, porque quiere, asegurar que esa mujer esté en todos sus sentidos.

El tiene, un problema personal con ella.

El día, que se presenten sus cargos entenderán las razones, de por qué tal decisión.

Assia:— Sí, es así, confiaré en ustedes.

Solo espero que todos los esfuerzos de años, de toda mi familia, no sean en vano.

Fiscal: — Les doy mi palabra, que no se van a arrepentir.

Ángel levantándose de su asiento, ayuda a Assia a ponerse de pie.

Dan las gracias, a este y prometen entregar a los tres en tiempo y forma. Un día antes del juicio.

El fiscal los acompaña, a la salida.

Entiende, todo el dolor, que ellos han vivido.

Y se había prometido, que no solo ayudaría a ellos, sino también al mismísimo Juez.

Assia y Ángel se dirigen junto hacia el auto.

Cuando ven llegar, 3 patrullas y pueden reconocer, que tras estas, está la camioneta de Margarita.

Se quedan unos segundos más, para ver con sus propios ojos, a la mayor pesadilla de su familia.

Quien por venganza, ha destruido, sistemáticamente la vida de estos.

Ven bajar, de la patrulla, a una mujer que a pesar de los años, aún llegando en un patrullero parece, que saliera de su propia limusina.

Ángel, puede ver la reacción de su amada.

Vuelve a tomar su mano, para tranquilizarla.

— Diciéndole, que todo tiene un momento y lugar.

Que no perdiera la fe.

Margarita, puede reconocer el auto de estos.

Debía, seguir jugando su papel, de niña incrédula delante de Falak.

Ella baja de la camioneta, acercándose, como si estuviera, preocupada, ante Falak.

Falak al verla toma su brazo, apoyándose en ella, no quería dar la impresión ante los mirones que ella era una detenida.

Cuándo de repente, de la nada, aparecen paparazzi,

por todos lados.

Con micrófono y cámara en manos, todos preguntan, porque ella se encontraba allí.

Margarita, no solo la protege de estos, sino que pide a los policías que los alejen de ellas.

Señorita y usted quien es, nos puede informar, porque motivo se están trasladando a la comisaría.

Ángel desde el auto al ver todo esto, mira a Assia, como queriendo saber, si ella preparó todo esto.

Está, niega con su cabeza, ella está tan sorprendida como él.

Una vez que ven, que estás son conducidas dentro, de la comisaría, la policía detiene en la puerta a todos pidiendo, que se retiren.

Falak al entrar, dos de los policías, piden a Margarita que tomara asiento, que la mujer sería conducida al despacho del fiscal.

Y así, Falak es donde a los gritos fue llevada a la fuerza a la oficina de este.

Margarita, le aseguraba a esta que ella se quedaría, a esperar a que le dieran su libertad, así llevarla a su casa.

Falak, al escuchar a esta se tranquiliza.

Esa muchacha, le había demostrado en poco tiempo, que realmente se preocupaba por ella.

Más tranquila deja que la guíen al despacho del fiscal.

Este le informa, que por su edad, no sería encarcelada en una petición, que por su seguridad, sería trasladada, a una casa donde estaría esperando la citación del juez.

Falak, pregunta si la muchacha que la acompañaba, podía ser llevada con ella.

El fiscal le informa, que en esos momentos no podría ser.

Debería esperar la decisión del juez, lo cual no sería hasta el día siguiente.

Está, pide hablar, con la muchacha.

El fiscal autoriza, tal petición.

Manda a llamar, a la chica y una vez en su oficina, Falak, le pregunta si podía aceptar acompañarla, si el juez lo autorizaba.

Obvio que está, acepta gustosa.

Más tranquila la mujer, toma asiento dónde le está indicado.

Fiscal:— Sra. ha entendido, porque razón usted está aquí.

Falak:— Si, pero estoy más que segura que todo fue un malentendido, me gustaría hablar con el juez a cargo.

Fiscal:— Como le informe, hasta mañana no podremos cumplir sus deseos.

Solo le pido un favor, si realmente usted cree que se está cumpliendo con una injusticia, aguarde a mañana.

Así podrá aclarar todo con el juez.

Lo que ella, no sabía que a ese juez, ella lo conoció cuando él era joven.

Y que hoy, siendo juez sería su mayor castigo.

Bueno muchas gracias, por su apoyo incondicional.

Les deseó un hermoso comienzo de semana, lleno de éxitos y bendiciones.

Mi saludo de siempre CARPEN DIEM ♥️.