—¿Cómo puedes amar a una chiquilla tan impulsiva y estúpida como ella?—bramó descomponiendo su rostro y verla así tan enfadada y dispuesta a enfrentarme solo por Christine, comprendí qué la supuesta amistad qué pensé que teníamos, solo era un espejismo para poder estar conmigo.
—¿Qué mierdas estás diciendo, Sarah?—protesté ya no muy dispuesto a soportarla—¿Acaso te estas escuchando? ¿Cómo puedes ponerte así cuando sabes que todo entre tú y yo ya termino hace mucho tiempo?
—¡Yo nunca estuve de acuerdo con eso!—reveló con los ojos llorosos y las mejillas rojas, pero de ira—¡Íbamos a casarnos y formar una familia!
Se creó un silencio incómodo porque yo no tuve el valor de hablar sobre ese asunto. Para mí, había terminado ese día en que la deje, no pensé en nada, ni en ella y mucho menos en la bo……
Waiting for the first comment……
Please log in to leave a comment.