I MISS YOU

Comencé a salir con Freddy cuando Becky desapareció. Fue un gran apoyo tenerlo a mi lado, se ganó mi corazón. Y lo amo ahora. Una tarde Becky me llamó, la escuché demasiada seria para creer que fuera una broma. Me senté a esperarla y cuando lo hizo, pensé lo peor. Su rostro estaba cansado, había tenido a Aileen y ahora estaba embarazada de Walter. Esperábamos con ansias al bebé. —No sé por dónde empezar, —miró sus manos. —Por el inicio —respondí con una sonrisa nerviosa. Esto estaba asustándome. —¿Becky? —No sé qué voy hacer —su voz se quebró. —Me estas asustando Becky. —No quiero dejar a mis bebes —Lágrimas comenzaron a aparecer en sus ojos. —¿Becky? —Destrozará a Randy. Una vez más lo haré sufrir. —Para por favor, me estas asustando. —No sé qué hacer. ¿Por qué a mí? —Becky, para —comencé a llorar y no sabía la razón. —Becky dímelo. —Voy a morir pronto. La miré sin creerlo. -¿Què? Alza sus ojos llorosos a mí. —Tengo un tumor en el cerebro, lo he tratado, pero es difícil de remover sin morir en el intento. -¿Què? —No procesaba esto. —Es una secuela del accidente que tuve hace como siete años. Se formó un tumor. Está creciendo dentro de mi cerebro. No puede ser —me llevé las manos a la boca para amortiguar un llanto. Esto no podría pasarle a mi amiga. —¿No se puede hacer nada? —El doctor me recomendó tomar medicamentos, pero eso dañaría a mi bebe. No lo quise tomar cuando tenía Aileen y no lo haré ahora. —Pero es tu vida la que está en riesgo. —No pondría en riesgo la vida de mi bebé por la mía. Eso nunca. —Lo entiendo. —Llevé mi mano a mi panza abultada. Yo tampoco lo haría, él bebe que esperaba era todo para mí. La comprendía como madre. —Descubrí el tumor cuando estaba embarazada de Aileen, en ese entonces me recomendaron tomar medicamentos para eliminarlo, todavía podía hacerlo, pero eso contraía el riesgo de dañar a mi bebé, así que no lo hice. Y ahora el tumor ha crecido. Tome medicamentos después de dejar de amamantar a Aileen, pero parecía que ya no hacía mucho efecto, y ahora no puedo hacerlo por mi bebé. —Sonrió tristemente. —Cambié mi vida por la de ellos. Son más importantes. Sollocé. —¿Por qué no le dijiste a Randy? Podrías haber tomado el medicamento después de que dejaras de amamantar a Aileen, si no te hubieras hecho embarazada después podrías estar mejor ahora. ¿Por qué? —Porque una madre protege a sus hijos. —¿Qué pasará cuando Randy lo sepa? —No se lo diré, todavía. No puedo hacer esto. Después de que nazca Walter tomaré el tratamiento, no sé si todavía funcionará, pero lo intentaré por mis hijos y Randy.  —Todavía hay esperanzas, lo sé. —Espero que las haya. No quiero dejar a mis bebes y a Randy. —No lo harás. —Espero que estés en lo correcto. Por eso te he llamado, mi neurólogo dijo que las náuseas y mareos serán más constantes. Necesito que me ayudes con eso para que Randy no sospeche. Y él nunca lo hizo. Confundía los mareos y náuseas con el embarazo, nunca sospechó que era por el tumor que Becky tenía. Ayudé todo ese tiempo a mi amiga, estuve ahí. El tumor se expandió más. El tratamiento no funcionó, el doctor le dijo que si lo hubiera hecho desde cuando era pequeño podría haber vivido, pero estaba en lo cierto. Ella no lo haría, quiso salvar a su hija y después a Walter. Sé que si algún día Randy supiera esto lo destrozaría. Por eso nunca se lo dije. Lo mataría saber que pudo recuperar a su esposa. Me pregunto si él también hubiera dicho lo mismo que ella. Y al final. Ella murió por salvar a sus pequeños.