Libro con error

Hola mi nombre es Andrea y tengo 17 años. Les contaré mi historia es un poco corta, no, no me crean. Soy huérfana de padre y madre. Mi mama murió cuando me daba a luz. Así que no la conocí, y mi papá murió cuando tenia 12 años, desde entonces vivo con mi abuelita paterna. Mi abuela se llama Nolasca, Noli como todos la conocen, una abuelita tierna dulce, amorosa, pero con un gran carácter. Al morir mi padre, mi abuela me acogió en casa, ahí empeze a ver a mi abue con diferentes ojos.. era la primera vez que me hablaba con gran seriedad. Andrea 12 años - queda prohibido que entres a la parte norte de la casa. Por ningún motivo puedes pasar de esta puerta.- señaló mi abuela una puerta de lamina color obscuro, mientras la cerraba con un pasador metálico y un candado. A mi edad no le di mucha importancia a esas indicaciones. Tenia más cosas en que pensar como para tener que pensar en una puerta. La casa de mi abuela estaba alejada de la ciudad, no era ni rancho ni granja, pero si vivía lejos de la comunidad, ahí solo había 4 casas, una separada de la otra. Y la colonia más cercana estaba cruzando la carretera, a unos 100 metros. Bueno en si, cada casa tiene su privacidad. Cada mañana pasaba por mi una amiga de mi abuela, para dejarme a la escuela, la señora Estelita, una señora agradable y esbelta, debía ser menor que mi abuela. Ya que su trabajo quedaba de paso, se ofreció en llevarme todos los días. Cada 15 días se reunía mi tita con sus amigas a jugar bingo, y yo aprobéchaba para bagar por la ciudad. Y reunirme con sami, una chica que conocí casi cuando entré a la secundaria. *Recuerdo Primer día de escuela. Al llegar a la escuela me senté cercas de la puerta delsalón. Para cuando llegara la hora de salir, huir del lugar - buenos días jóvenes.- saludo una mujer alta de cabello n***o en vos muy alta y autoritaria. Se acomodo en su escritorio saco una lista y empezó a tomar... lista??? Cada q mencionaba a un alumno volteaba a verlo. -valla, valla tenemos compañera nueva.- dijo la maestra mientras me buscaba en el salon.. Todos voltearon a verme. Y fue fácil para la maestra encontrarme. Juro que quería morir de vergüenza. - señorita Andrea puede ponerse de pie y presentarse al grupo. La maestra no pidió, exigió que me presentará. Me limpie las manos en la pantalonera del deportido, estaba muy nerviosa y me puse de pie. Fue más grande mi vergüenza que al querer hablar, La vos me traicionara y me saliera un gallo. Los compañeros rieron y quería morir. -silencio chicos.- pidió la maestra -buenos dias.- dije mirando la mesa de mi butaca- mi nombre es Andrea pero pueden decirme Andy -gracias señorita puede sentarse. -Pidió la maestra. En esta secundaria los profesores son los que se mueven de salón. Los alumnos nos tomamos un descanso entre cada cambio en lo q llega el siguiente profesor. Algunos grupos de amigos se me acercaban a conversar conmigo y otros se limitaban a mirarme. Pero no fue hasta la hora de salir a hacer deporte que conocí a samanta. -buenos días muchachos, agan parejas y se ponen en la cancha en una línea. Todos ya tenían pareja esepto una chica delgada, que se encontraba sentada en el borde de la cancha mirando el piso. ¿Ella está en mi clase? - tu!!.- Grito a mi direcion - ¿eres nueva? -si pofesor.- dije apenada - excelente, samanta y tu seran parejas hasta que se termine el ciclo.- La chica dio un salto cundo grito "excelente" el profesor La chica se acercó apenada a mi. - hola Andy espero me tengas paciencia, no soy buena en deporte.- dijo samanta Y en verdad, se movía muy despacio en la carrera de relevos, pero quedamos en buen lugar cuando toco mi turno de correr. Toda la hora de deporte la motive a que hiciera las actividades que nos ponia el profesor, la pobre terminó perlada en sudor. En el descanso de deporte nos sentamos juntas y me di cuenta que es una chica muy divertida pero tímida. De inmediato cambiamos números de celular y ahí empezamos a juntarnos cada día. empatizamos de inmediato, aunque casi no teníamos cosas en comun.. *Andrea 14 años El martes por la mañana Estelita paso por mi, como de costumbre. -buenos días hija -buenos días Estelita, aquí le manda mi abue.- le entregue una caja con galletas y un termo de café -gracias mija que delicia.- dijo mientras tomaba del termo- sabes Andy en unos días llega mi nieto, el entrará a tu escuela. Espero y puedas guiarlo. Nunca pregunte a que año iría, solo supuse que entraría a primer año, así que el dia en que llego Estelita a recojerme.. Me sorprendió ver a un muchacho muy guapo, aproximadamente de mi edad. Pero más me sorprendió cuando miré su brazo y tenia tatuajes, el rápidamente los cubrió con su manga larga. - buenos dias.- dije mientras me sentaba en el asiento trasero justo por detrás de Estelita. El chico no dijo nada, solo se limito a mirar al frente. Como cada día le di su café a Estela -gracias hija, ya te dije q no es necesario -no es molestia Estelita -mmm almendras, que rico Andy. Mira este niño tan bonito es mi nieto Julio.- y en modo de cuchicheo y burla me dijo- es guapo verdad!! Me reí ante la cara que puso la señora, obviamente me puse roja y causa de q ella estallará en risa. El trallecto a la escuela miraba a Julio cada momento, me llamó mucho la atención su perfil. Pero en si un muchacho muy serio, como si estuviera enojado con todo el mundo. Bajamos del auto y comenzamos a caminar hacia la puerta de la escuela. Busque con la mirada a sami pero no la encontré en donde siempre me espera . -Andrea.- me llamo una vos masculina por enfrente de mi. Era Julio que llamaba Mmm.- solo articule eso El me miró por un momento sin decir nada -¿necesitas ayuda?.- el solo se dio la vuelta y se fue dejándome ahí hablando sola.. Pequeño patan, pensé. Espere un rato para ver si llegaba sami pero sonó el timbre y ella no apareciapareció. Buen momento para olvidar el móvil en casa. Corrí hacia la clase, rogando q la maestra no haya llegado primero. La mañana paso lentamente, sami nunca llego y me toco trabajar sola en algunas clases. A la hora del receso pude divisar a Julio sentado en la mesa más alejada de la cafetería. Le quite importancia se que no nos llevaríamos bien. La siguiente clases era quimica... entramos al laboratorio, hoy examinaremos varios objetos en el microscopio. Tomé mi lugar y empecé a trabajar sola viendo las texturas de varias cosas y anotando en mi cuaderno... -Julio.- el profe nombro- siéntate con Andrea, su compañera no vino. Rogue para que el Julio que nombro no fuera el mismo a quien conocia.. Y que creen, el mismísimo patán. Se sentó a mi lado y se recostó en la banca. Como es que esta en mi clase si en toda la mañana ni entro, pensé varias veces. En fin le pasé el microscopio para que ayudara. -ni lo pienses.- dijo apenas cuando lo movi- termina tu!! - que te crees somos equipo -pues terminalo o tendrás nota baja. A mi me da igual..- dijo después de ignorarme. Claro que me enoje, y no lo podía acusar ya que el profe había salido. Termine el trabajo yo sola, lo mirava de reojo y pude ver q el muy sin verguenza me mirava y con una sonrisita retorcida que a decir verdad lo hacía ver muy guapo pero a mi me hacía enojar mas. Sonó el Timbre de salida... claro que no le iba a pasar apuntes. Pero el idiota arrebato mi cuaderno de la mochila y se salió del salón apresurado. lo vine alcanzando cuando estelita ya estaba en la entrada con el auto encendido. -como les fue chicos!! -excelente abue, Andrea es excelente amiga- dijo el idiota sacándome de mis casillas. Lo odie al instante. No quise contrariarlo y hacer sentir mal a Estelita así que me fui enojada todo el trallecto a casa. Así pasaron varios meses, el me molestaba, yo me fastidiaba e incluso a veces lo golpeaba. No había día en que no nos regañara el profe o la maestra por estar distraidos Julio o más bien jew (yuul) como le gusta que lo nombren, hizo que nos movieran a sami y a mi en el equipo.. convencí a varios profesores q no seria buena idea, y optaron con dejar a sami con nosotros.. fue imposible moverlo El se encargaba de hacerme sentir molesta todos los días. A sami no le decía nada, con ella no se metia, empecé a sospechar q a jew le gustaba sami. Pero bueno. Todas las mañanas al llegar a la secundaria había un séquito de chicas esperando a que jew bajara del carro para seguirlo por la escuela, y mi amiga esperaba por mi. Creo que todo cambio entre nosotros dos, cuando otros chicos y chicas quisieron también hacerme bromas, pero la peor parte se la llevó Esteban. Ese día después de la comida llegamos tarde al salón. Aunque el maestro aun no llegaba, nos apresuramos a sentarnos Y ahí bajo mi falda sentí algo pastoso y húmedo, cuando me levante Esteban reía a carcajadas, el muy imbecil, puso un sandwich justo cuando me sentaba, y todo su contenido se embarro en mi uniforme. -que te pasa idiota.- le grite ya enojada Todos seguían riéndose mientras yo despegaba el pan de la falda. Todo paso tan rápido que no vi venir el momento en el que Jew se levantó de su lugar tomado lo que quedó en la banca de sobras y con un golpe lo estampó todo en el rostro de Esteban. Se hizo un silencio en el salon. -que te ocurre imbecil.- le dijo Esteban -quien te crees tu para hacerle eso a Andrea -yo solo hice lo mismo que tu, quise molestarla, no es algo que tu no hagas -Andrea es mi amiga y es un juego entre nosotros, no puedes tocarla, primera y última que le haces algo. Jew soltó al muchacho y me tomó de la mano, encaminandome hacia afuera del salón, sentí su agarre muy fuerte, se veía enojado y yo completamente sacada de lugar... ¡quien era este chico! Me llevo hasta los lookers y me paso una pantalonera del deportivo. Agradecí con una sonrisa. Fui al baño, tomé varias servilletas de papel con agua y limpie mi piel no quería andar oliendo a sandwich todo el día, cuando me cambie, trate de lavar mi uniforme y lo guarde en una bolsa plástica donde venia la pantalonera de jew. No se que pasaba con jew, ni en que momento me considero su amiga. Si yo lo odiaba, odiaba sus bromas que hasta yo empecé a jugar a su juego. Era algo que no entendía. Al salir del baño el seguía ahí afuera esperando. -no pensé en ningún momento que mis bromas llevaría a otros a querer hacerte lo mismo, ¡disculpame!.-dijo el -ni yo entiendo nada, pero gracias -¿volvemos a empezar?.- sonrió y era una sonrisa sincera, no esa retorcida q ocasionalmente tenía para mí al hacerme enojar -¡claro! No se en que momento todo cambió, las bromas pesadas de jew empezaban a hacerme reír, disfrutaba molestarlo también yo. En clases de biología el se quedó dormido y aproveche para maquillarle. Todo reímos, esperaba a que el se enojada conmigo y su venganza fuera peor. Pero el idiota tomó el suéter color amarillo de sami, se lo puso y empezó a caminar muy coqueto. En el almuerzo también empezó a juntarse con nosotras. Para ser sinceras siento que samanta y yo hemos cambiado con la llegada de el, sami ya no es tán penosa como antes y yo no lo odio, siento que lo considero un buen amigo. *Andrea 17 años Nos habíamos a cotrumbrado a la ausencia de Jew. Cada cierto tiempo se iba, regresaba unas semanas después cansado y serio, Ya no era raro ni para Sam ni para mi verlo así, solo era cuestión de que pasarán los días y el regresaría a ser el mismo. - nos vemos entonces el fin de semana para ver la película.- dije - yo los veo en el cine tengo algo que hacer antes de verlos.-dijo sam Se llegó el día del cine, y Jew pidió el carro prestado y fue a recogerme. Esperamos por 20 minutos afuera del lugar y Samanta no llegaba, decidí marcarle , contestó su mamá ella dijo que Samanta Estaba muy enferma que no nos acompañaría. Iría a verla el domingo, para llevarle unos postres en lo q le ago compañia. Jew y yo entramos al cine, cambiamos la película ya que a Samantha no le gustan las de terror y ahora podríamos ver una distinta. Así que vimos una de terror suspenso muy buena. Pasamos la tarde paseando por la ciudad y comiendo toda la chuchería que nos encontramos. Platicamos y bromiamos, fue algo distinto a todas las veces que salimos, había algo nuevo. Camino a casa jew paro cercas de un parador. -que qué hacemos aquí?.- pregunte -ven te voy a mostrar algo, usualmente te vengo aquí solo, a fumar o pasar el rato. Me encaminó entre el pequeño campo y llegamos a un lugar con árboles, a un lado corría un riachuelo cristalino, y se veían varios peces y el musgo creciendo en el lugar. El caminó hasta un árbol que crecía al ras del suelo y se acostó sobre el. Yo me dedique a ver las flores y mirar el calmado riachuelo. -puedes meter los pies, el agua esta rica.- me animo jew a hacerlo Traía una falda larga y tenis, me quite un tenis y levante la falda, meti con cuidado el pie, y que maravilla el agua estaba tibia. Termine sentándome en el pasto al borde del agua con ambos pies dentro, algunos peces sentían curiosidad acercándose a mis dedos lentamente, Me daba risa el toque de sus bocas a mi piel era muy curioso -desde cuando conoces este lugar.-pregunte -desde hace mucho, suelo venir seguido. Me levante del lugar y cuando seque mis pies me acerque a él junto al árbol -¡me gustas! Escuche esas palabras y mi corazón dio un salto, y empezó a agitarse muy rápidamente, una sonrisa escapo de mi boca, y no tengo la más mínima idea del porqué. -desde hace mucho tiempo me gustas y ni si quiera se que opinaras, tenia que atreverme a decirlo. Empezó a decir en vos alta - ya no quiero ser más tu amigo Andrea. Tomó mi mano -Si me permites, yo quiero más contigo.- volteo a verme justo cuando yo levante el rostro para mirarle. - cierra tus ojos, si no quieres yo entenderé .- tomó mi rostro en sus manos y mi corazón latía frenéticamente . Se acercó a mi lentamente, mis manos sudaban y el me miró casi pidiendo permiso para hacerlo. Dude por un segundo en dejarlo, pero mis fuerzas flaquearon, yo también quiero lo mismo, así que cerré los ojos y ahí sentí sus suaves labios juntos a los míos. Un tierno y suave beso me dio, seguido de un beso más profundo e igual de tierno. *Narra samanta El viernes por la noche se escucho el timbre de mi casa, unos minutos luego, mi madre llamó a mi puerta, diciendo que mi amigo estaba aquí. Justo en eso El entro por mi puerta de mi cuarto Fue extraño ver a Julio en mi casa, por lo general venía también Andy. Así que el comenzó a platicar conmigo y me contó lo que traía entre manos -Jew que pasa, que haces aquí a estas horas? Sam bingo a pedirte un consejo, más bien un favor -si es de amor sabes que soy pésima para eso, pregúntale a andy -precisamente es de ella de quien quiero hablar. algo que me sorprendió ya que tiempo atrás descarte la posibilidad de q a el le gustará Andrea, pero ahí estaba el declarando sus sentimientos hacia mi amiga y claro q me emocione. Las siguientes horas las pase hablando con Julio, y me sorprendió la declaración que me había dado. Me pidió, más bien, me rogó que no fuera al cine con ellos. Y yo cómplice de el le dije como se le acercara -Obviamente esto me lo vas a pagar Julio, yo quería ver esa película. -Pídeme lo que quieras dijo el con una sonrisita, y claro que lo cobraría. El lunes por la mañana ambos llegaron, espere emocionada pero al ver que no pasaba nada me quedé extrañada y creí que se bajaría de el carro tomados de las manos, no fue así... como si nada hubiera pasado, entonces creí que jew no sabría atrevido a decirle algo a Andrea. los saludé y empezamos a caminar juntos hacia la escuela. en eso jew saca un paquete y me lo entrego, grité de emoción cuando sentí el peso, sabía que era el libro que quería y él así había pagado su deuda. Todo seguía normal no vi señal de que algo hubiese cambiado. y aunque tenia muchas ganas de preguntar, opte por casar. hasta que alguno de los dos dijera algo. *Relata Andrea después de nuestro primer beso, le pedí a jew que no dijera nada aún. Bueno aunque no me había pedido nada en si, solo que no se si me gusta como algo mas o como amigo. Aunque a decir verdad me gustaron sus besos y mucho Y lo que me hizo sentir, wow creí desmayar. Así que le pedí tiempo para conocernos más. Si, si ya se, ya lo conozco, pero a mi defensa lo conozco como mi amigo. Y yo quiero conocerlo de esa otra manera y que así se vallan dando las cosas. Las cosas siguieron normal en la escuela, solo se me hizo raro q el lunes llegando jew le entregara un libro a sami, lo deje pasar no di importancia, aunq si me dio un poquiro de celos. Jew tocaba o tomaba mi mano por debajo de la mesa y a mi me agradaba su tacto y la manera en que me hacía sudar. Con el tiempo empezó a cooperar con los trabajos ya no me dejaba todo a mi, algo que agradecí que ya no fuera tan grosero conmigo ni cargado.