bc

Siempre fuiste tú

book_age16+
2.2K
FOLLOW
24.5K
READ
goodgirl
sensitive
drama
comedy
bxg
abuse
childhood crush
virgin
like
intro-logo
Blurb

(libro 4 de saga cliché)

Rebeca, o Beca como le dicen sus amigas, curso su último año de secundaria, junto a sus mejores amigas. Quiere estudiar medicina y ser doctora como su padre, quién murió hace unos años. Ella está enamorada de su mejor amigo y vecino, Dylan, pero él solo la ve como una hermana y amiga.

Se animará Beca en algún momento en confesarle sus sentimientos a Dylan? Él cómo reaccionará cuando se enteré de sus sentimientos?

¿Qué pasará tras ser rechazada decide entablar una relación tóxica?

chap-preview
Free preview
Capitulo 1; Alguien importante.
Este es mi último año de secundaria, estoy contenta porque por fin voy a estudiar lo que tanto anhelo, que es medicina, mi papá era médico y mí mamá también lo es. Mí papá murió hace tres años, pero todos los días lo recuerdo y lo extraño, yo quiero seguir sus pasos, ser una buena doctora. Tengo a mi mamá que está conmigo, tuvo que hacer de madre y padre, es bueno contar con ella, no estar totalmente sola, también tengo a mis mejores amigas, que están siempre para mí, por cierto soy Rebeca Miller, Beca para mis amigos y como dije es mi último año de secundaria. Tengo un grupo de amigas, Katherine que le decimos Katy, ella es la más graciosa del grupo, nos hace reír con sus ocurrencias, pero también tiene baja autoestima, según ella es fea, gorda y enana. Pero no es así, ella es muy hermosa, no cubrirá el estándar de delgadez que imponen las grandes marcas, ella no es gorda, y sí tiene baja estatura, mide uno cincuenta, pero ninguna de nuestra grupo es alta. Micaela, a quien le decimos Mica, es el demonio en persona, no se deja intimidar por nadie, y según ella a excepción de sus padres nadie le dice que hacer, tiene un temperamento bastante fuerte y cuando se juntan con Katy, no hay quien las pare. Quién diría que esa carita de ángel es el diablo en personas, no creé en el amor, pero creo que es porque todavía no se enamoró, O algo le pasó y nunca nos enteramos. Y está Silvia, o Sil, es la más tranquila del grupo mayor que nosotras por un año, y también la más madura, ella vive con su papá, cuando nació su mamá los abandonó. A ella le gusta andar de fiesta junto con Mica. Todas vamos juntas al mismo colegio, año y curso. Al terminar nuestro primer día de clases, me despido de mis amigas en una esquina, mientras camino hacia casa recuerdo lo incómodo que fue hoy, el chico nuevo que se llama Mateo, no dejaba de mirarme, fue realmente embarazoso, sobre todo, viendo cómo Katy quedó embobado con él, sé que si él llegará a gustarme ella no diría nada, según nuestros códigos, que lo hicimos cuando éramos chicas, que si nos gustaba el mismo chico, él decidiría con quién quedarse, y la otra no se pondría mal, eso por ahora nunca pasó con ninguna, pero si llegara a pasar eso, yo me haría a un lado, me sentiría muy incómoda, pero si ellas lo quieren hacer a mi no me molestaría, no perdería una amistad por un chico, también convengamos que la única que tuvo novio fue Silvia, y le fue tan mal, que quedó muy destrozada. Convengamos que ese tipo era un idiota.Y por esa mala experiencia nos dió temor a todas, y no empezamos ninguna de nosotras una relación por miedo a salír lastimadas. Además que yo ya encontré al amor de mi vida, aunque él no lo sepa, ese es un pequeño detalle que no viene al caso. Como dije ya estoy enamorada. Estoy llegando a mi casa, y ahí está mi verdadera razón por lo cual no salgo con nadie, lo veo con la camisa engrasada arreglando una motocicleta, porque de eso trabaja repara motos, es mi vecino, el amor de mi vida, y sí, es mi mejor amigo, Dylan. Así todo sucio lleno de grasa me gusta, sé que es todo un cliché enamorarse de tu mejor amigo. pero, no lo planeé lo juro, sólo pasó, él mil veces sin darse cuenta me mandó a la zona de amigos, pero yo sigo enamorada de él. Como una tonta. Cuando estoy llegando a el portón de mi casa me ve, levanta la mano en forma de saludo yo le correspondo, y se aproxima hasta quedar cerca mío, me da un beso en la mejilla. Y como todo buen amigo pregunta por mí día. —¿Cómo te fue en tu primer día? —pregunta interesado. —Bien, como todos los primeros días de clases, sin hacer nada —me quejo —. Y vos ¿cuando empezás la facultad? —le pregunto porque además de tener su trabajo, estudia abogacía, no es lo que le gusta realmente, pero por cumplir una promesa lo hace. —Dentro de tres semanas confirmaron. —falta poco —recuerdo. —Ni me lo recuerdes, empieza mí tortura —confiesa frustrado, cerrando los ojos, no queriendo recordar. —¿Y para qué lo haces? —le cuestiono. —Ya sabes porque lo hago. Que te parece si nos ahorramos está discusión —corta la conversación y yo asiento, no quiero terminar discutiendo. Cambiamos de tema a uno más trivial, hasta que me hace la misma pregunta desde hace un año, pregunta que me rompe el corazón. —¿Cómo está Silvia? —quiere saber. Sé que le gusta mi amiga, a ella se lo dije un montón de veces, pero me dijo que ella no siente lo mismo por él, no sé cuál es el verdadero motivo, si es porque yo estoy enamorada de él, o porque no está preparada para empezar una nueva relación, o me miente. Él no sabe que se lo confesé, obviamente me mataría. Dylan está en nuestro grupo de amigos. Y por eso Silvia esquiva las indirectas que él le tira. Ella no quiere que él se sienta mal. Al principio creí que eran ideas mías, más bien quería creer eso, hasta que él me lo confesó, pidiendo que interceda por él. ¿Cómo voy a hacer eso? Pero lo hice, se que estoy loca, empecé a tirarle indirectas a Silvia hasta que se lo confesé. Y me quedé con un dolor en el pecho, pero son mis amigos no puedo ser egoísta. A pesar de que pensara que quién mejor que yo para estar con él y cuidarlo. Sé cómo me ve, como su amiga su hermana, sé que a él nunca le interesaría, nunca se fijará en mí. Él merece una buena chica que lo haga feliz, y mi amiga lo es, ella es frontal, madura, un poco directa, como dice ella al pan pan y al vino vino. Prefería mil veces que se ponga de novio con mi amiga, que con las perras que acostumbraba salir, varias le han roto el corazón, aunque no quiere admitirlo es muy malo eligiendo novia, no sé si es porque yo no lo podía ver con nadie o porque es muy malo eligiendo, es la segunda opción definitivamente, necesitaba a alguien que no lo lastime, que no lo use, que lo valore, alguien como yo que lo cuide, pero eso no iba hacer posible. Él no se da cuenta y yo no sé lo voy a decir. Silvia se había hecho amiga nuestra el primer año de secundaria, a diferencia de Mica Y Katy que somos amigas desde el jardín de infantes, es un año mayor que nosotras y por problemas personales tuvo que empezar más tarde sus estudios secundarios. —Está bien como desde ayer que la viste —admito. Sé acerca Marcelo, que es el mejor amigo de Dylan, trabaja en el taller de motos, también y estudia abogacía, ellos son amigos desde chicos, también es nuestro amigo, pero últimamente me empezó a ver diferente, créanme yo no me creo linda para nada, pero con las indirectas que me tira Dylan y él me di cuenta que siente algo por mi, yo por mi parte me hago la desentendida, no quiero nada con él solo tengo ojos para Dylan, nos conocemos hace mucho y no quiero perder su amistad, no saldría con él para olvidarme de Dylan. Tampoco le diría a Dylan lo que siento, no podría perderlo como amigo, es un excelente amigo está en las buenas y en las malas, cuando más lo necesito, cuando pasó la tragedia de mi papá, estuvo ahí para contenerme, consolarme, prefiero guardarme lo que siento. Katy le dice a Dylan que es un cortito, porque según ella no puede entender que sea tan idiota para no darse cuenta que estoy enamorada de él, que crecí que no soy una nena ni su hermanita. Ella todo el tiempo le tira indirectas que es ciego y tonto, hasta un día él le pregunto porque le decía así, y le contesto que no se preocupara que algún día se lo ibas a confesar que todavía no era el momento. Mis amigas también son mi apoyo y mis columnas siempre están ahí para ayudarme. —Podríamos ir al cine —propone Marcelo. —Dale estaría bueno les digo a las chicas así vamos juntos —todos formamos un lindo grupo por lo general salimos todos juntos. —Quería que salgamos los dos solos — antes salíamos solos pero desde que me di cuenta que quería algo más conmigo evitó hacerlo. —Lo que pasa es que quedé con las chicas para ir con ellas. Vamos todos juntos —propongo. Él se quedó pensando un rato, hasta decide aceptar mí propuesta. _ _ _ _ _ Ya en casa, caliento la comida, mamá la deja preparada cuando ella tiene guardia, yo la ayudo a cocinar porque viene cansada de trabajar, cuando mi papá vivía se ayudaban entre los dos, ella trabajaba menos horas para estar más conmigo, aunque a veces me dejaba al cuidado de mis abuelas cuando no le quedaba otra. Mi papá era un buen papá, pagaría lo que sea por tenerlo, lo extraño demasiado, sino hubiera sido por esa emergencia si la calle no hubiera estado tan mojada lo tendría aún conmigo, me deprimí mucho, éramos muy unidos, mis amigas mi mamá Dylan y la psicóloga me ayudaron a salir de mi tristeza, por eso no puedo darme el lujo de perder a nadie más. Después de almorzar empieza a acomodar la casa, mi mamá viene del hospital cansadísima después de treinta y seis horas de guardia, come algo rápido y se va a dormir, yo trato de hacer el menor ruido posible, aunque eso es imposible, soy un poco demasiado torpe, y cuanto menos ruido quiero hacer es cuando más lo hago, se me cae una olla, me golpeó y grito, no serviría para espiar a alguien enseguida me descubrirían. En pocas palabras soy un desastre, menos mal que mí mamá se acostumbró a que soy así. Se compró unos tapones para taparse los oídos, y así poder dormir tranquila, y no escuchar los ruidos que ocasiono. En mi habitación me pongo a repasar, porque este año quiero hacer el examen de ingreso para entrar a la facultad, algunas materias las puedo dar este año, así que quiero aprovechar el tiempo al máximo. Dylan había hecho lo mismo, y pudo con las dos cosas, con la facultad y el secundario, y yo como era una come libro sabía que lo podía hacer. Además de empezar antes la carrera, quería ir con Dylan a la facultad, ya me había imaginado todo en mi cabecita, quería espantar a todas esas perras que lo rodeaban. Según Marcelo había muchas detrás de él, eso obviamente me molestaba, para no decir que me ponía celosa. Y cómo no iban a estar atrás de él si era un bombón, pero a mí lo que más me gusta es su personalidad, quería arrastrar de los pelos por toda la facultad a cualquiera que sé le acerque, claro sin que él se dé cuenta, por supuesto, estoy hecha toda una acosadora, obviamente no iba hacer de forma literal. No podía ser tan obvia. Mientras estoy estudiando en el grupo de w******p que tenemos con las chicas me llega un mensaje. Mica: holiii. Katy: horribles que hacen. Sil: hola chicas qué hacen. Yo: Hola, estoy estudiando. Katy: qué raro la come libro, cerebrito. Mica: ja ja ja ja ja ja. Que mala que sos. Sil: ella es responsable, tiene que hacerlo. Si quiere entrar a la facultad. Katy: ustedes dos le sacan lo divertido a la vida, manga de Nerds. Mica: quería que nos juntemos, las extraño. Silvia : yo no puedo, estoy ayudando a mí papá. Katy: yo también mamila, pero no puedo estoy en el parque con Pedro, estamos jugando a la pelota. Pero si es para juntarnos en casa de Silvia y ver a su papá, voy para allá. Yo: yo tampoco puedo, mamá vino cansada del hospital y está descansando, no quiero hacer ruido, perdón. Silvia: Katherine, no es gracioso. Mica: jajaja, mala no molestes así a Sil sabés que le molesta, ok no hay problema chicas, nos vemos mañana en la escuela. Katy: dale nos vemos en la cárcel mañana disculpen. Sil: bueno nos vemos mañana. Yo: ok, nos vemos mañana. Si seguían insistiendo iba a terminar accediendo. Terminó de hablar con las chicas y me pongo a estudiar otra vez. _ _ _ _ _ Estoy estudiando hace un par de horas, necesito descansar un rato, pienso en bajar y prepararme una infusión. De pronto suena el timbre de casa a lo cual salgo corriendo, bajo las escaleras a toda velocidad, casi me caigo quiero decir, golpeándome el dedo chiquito del pié, como duele este dedito, quién me manda a estar descalza, no quiero que el timbre despierte a mí mamá. Mis papás compraron esta casa que consta con una planta alta dónde hay tres habitaciones arriba, la de mi mamá, la mía y una de invitados, la cual no se usa nunca, porque cuando nos juntamos con las chicas a hacer pijamadas y vemos películas, nos quedamos en mi habitación, solo la usan mis abuelas cuando nos visitan. Llegó a la entrada sobando el dedo, y ahí está el amor de mi vida. —Hola, ¿qué pasó? —pregunto cuando abro la puerta con una mueca de dolor en mí cara. Él se larga una carcajada imaginando lo que me había pasado, yo lo miro fijo y seria, y cuando termina de reírse suelta. —Quería pedirte que si por favor me ayudas con una moto, Marcelo se fue y no puedo hacerlo solo —él me había enseñado a arreglar motos y de vez en cuando lo ayudo. Marcelo trabaja con él en el taller. —No sé si debería —Le digo molesta por su risa. —Dale por favor —súplica —es para entregar mañana, Marcelo tenía algo importante que hacer. —Hay varios motivos por los que no debería hacerlo —le digo con la cara seria sin ningún gesto. —¿Cuáles? —manifiesta. —¿Querés que enumere? —levanto las cejas —. Bueno, te reíste de mi desgracia, en vez de preguntarme que me pasó, o cómo estoy, —Bueno, bueno, perdón por no preguntar qué te pasó, pero conociéndote, estoy seguro que bajaste corriendo y te golpeaste al bajar las escaleras. —Por decirme torpe ahora no te ayudo nada —lo miro con cara de pocos amigos cruzándome de brazos. Pone cara de perrito mojado y me dice —perdón, perdón, no sos ninguna torpe por favor ¿me ayudas? —súplica. Me hago la pensativa porque siempre lo ayudaba, y la verdad no podía negarme, me encanta pasar tiempo con él, y al final siempre termino cediendo. —Me pongo las zapatillas y vuelvo —le aseguro. Y mientras subo las escaleras escucho que me dice. —Si calzate mejor porque te vas a volver a golpear — larga una carcajada, lo cual yo agarre lo primero que encuentro a mano y se lo tiro, obviamente no le pego a él, pero le atino a otra cosa que hace un ruido terrible. Y él se vuelve a reír a carcajadas burlándose de mí. Decido cambiarme de ropa porque seguro termine sucia, no sé ni cuenta ropa arruiné ayudándolo, y obviamente me calzo. Voy hacia su casa y lo ayudo con lo que él me pidió, como imaginé termino ensuciándome, está es la vida del mecánico. Cuando terminamos tomamos unos mates y nos ponemos a hablar. —¿Qué pasa con Marcelo? —lo confronto, él se hace el desentendido. —No sé pregúntale a él —odio que se haga el tonto. Lo miro fijo y largo un suspiro —. ¿Por qué te haces el desentendido? —lo enfrento. —Yo no me voy a meter los dos son mis amigos —advierte. —Entonces pasa algo, a buen entendedor pocas palabras. Y tus evasivas me aclaran todo. No sabés mentir —digo obvia. —Él es un buen tipo y gusta de vos. —quiere convencerme. —Nunca dije que no lo fuera —aclaro —, pero para mí es un buen amigo y nada más. —¿Él es un buen amigo como yo? —y pienso justamente que no, porque a él no lo quiero como amigo. Suelto sin meditar mis palabras. —¡No! —y ahí me doy cuenta lo que acabo de decir, él me mira con cara que no entiende nada y aclaro —Vos sos mi mejor amigo y él solo mi amigo —trato de sonar convincente. Él hace una sonrisa de felicidad al escuchar mis palabras. Me pregunto porque tengo que mentir tanto. Porque no le confieso lo que siento y listo. Cómo si fuera tan fácil. —Además —suelto el aire contenido tardo unos segundos y sigo diciendo —me gusta alguien más —confieso y es la verdad. Él me mira asombrado y exclama —¡Quién!? —no le agradó nada lo que le dije. —Alguien que vos no conoces —respondo para evitar más interrogatorios. —Si pasa algo con alguien lo tengo que saber. No podés salir con cualquiera, a Marcelo lo conozco, se que te va a cuidar —clarifica. —Quedate tranquilo, que este es un amor unilateral, jamás se fijaría en mi —lo tranquilizo. Ay Dylan si supieras que hablo de vos. —Pues si no ve lo hermosa que sos es un idiota, no vale la pena. —Que casualidad Katy piensa exactamente lo mismo que vos —recuerdo las veces que Katy dijo que el es un idiota por no darse cuenta de mis sentimientos. —Que raro que estemos de acuerdo con la enana —ríe divertido. —Lo mismo digo —expreso sarcástica. Cambio de tema, no quiero que siga preguntando, y hablamos de temas triviales, y después de un largo día me voy a casa a descansar, pensando qué, por lo menos le había confesado que había alguien que me gustaba. No era una declaración propiamente dicha, pero era un adelanto, o eso es lo que yo pensaba. Al llegar a casa mamá ya estaba levantada, me pregunta dónde estaba, aunque de seguro sabe mí paradero, si me hubiese ido con las chicas le hubiese dejado una nota avisándole. Le pregunt8 por su día, me encanta escucharla hablar de sus pacientes, me hace añorar el día que logre mí objetivo, por fin ser doctora. Mamá prepara la cena, y mientras comemos, conversamos de mí primer día de clases. Debido a su trabajo no nos vemos mucho, y aprovechamos todo momento que estamos juntas para hablar de cómo nos fue en el día. Y después de un día agotador para ambas nos despedimos y vamos a dormir. _ _ _ _ _

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

La esposa rechazada del ceo

read
164.6K
bc

Prisionera Entre tus brazos

read
86.0K
bc

Navidad con mi ex

read
8.7K
bc

Bajo acuerdo

read
7.9K
bc

Mi Sexy Vecino [+18]

read
50.2K
bc

Tras Mi Divorcio

read
509.4K
bc

Yo, no soy él

read
88.2K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook